El propio Ismael llegó a reconocer y alegar que tenía un "problema sexual", que varios psicólogos explican a lo largo del resumen del caso. Además, Ismael llegó a solicitar su propia castración química, por temor a cometer más crímenes: "No lo digo por decir, lo digo porque tengo miedo de que el día de mañana me pueda pasar algo similar. Pero si tengo que estar 20 o 25 años ingresado lo estaré porque quiero tratarme y quiero que me ayuden y, sobre todo, que me castren".