Cemre sigue metida en su mundo y Ali no puede más que sentirse culpable, pero eso también está haciendo que Zeyno se siente cada vez más lejos de él. A Bilal no le queda otra que cumplir con las órdenes de Kenen a pesar de que eso suponga una traición a los suyos. Hazal, Ege y Çagri hacen piña en contra de Berk.