Déborah pensaba que podría cambiar a Pau pero no podía estar más equivocada. Su primer amor de adolescencia fue un chico tremendamente posesivo y celoso que la anulaba y la maltrataba psicológicamente. Consiguieron fácilmente una orden de alejamiento, pero ella dependía emocionalmente de él y se sometió voluntariamente a un infierno inimaginable a espaldas de su seres queridos (07/10/2014).