Carlota y Alberto deciden ayudar a Marcos montando una cita a ciegas con Ana en el CBC, con la oposición de Míriam, Alex y Nico. El misterio del dopaje del equipo del Palomeras sigue sin resolverse, aunque Sebastián sigue pensando que el culpable es Iñigo a quien Nico defiende a capa y espada.