Soraya se apuesta con Mauricio que Chema no es un llorón. Si gana Soraya, Mauricio tendrá que ir a donar sangre y si gana el hostelero, la camarera tendrá que acompañarle a una corrida de toros. Al principio, Soraya se resiste, pero una vez en la plaza quizá no le disguste tanto la idea.