Los territorios indígenas de Costa Rica viven hoy una crisis de violencia por un conflicto de tierras que se arrastra desde el año 1977. La ocupación y explotación de tierras dentro de los territorios es una práctica que el Estado no ha podido subsanar y que ha llevado a los legítimos dueños de las fincas a recuperar su territorio amparados por la ley y los convenios internacionales; sin embargo, la reacción violenta de los finqueros ha escalado de manera peligrosa.
Luego del asesinato de Sergio Rojas y Jerry Rivera el año pasado, este año ya se contabilizan más de 15 incendios con heridos graves y tres tentativas de homicidio contra líderes indígenas.
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