En México ser joven puede ser una sentencia de violencia en estados como Guanajuato, Sonora, México o Zacatecas, donde la población vive el asedio del narcotráfico y el crimen organizado a diario. Expertos hablan de generaciones perdidas, mientras miles de jóvenes son captados para delinquir o asesinados en su lucha contra la desigualdad, el despojo y la violencia que mantiene vivos sus reclamos. Durante el 2021, en México murieron alrededor de 26 mil adolescentes y jóvenes de entre 15 y 24 años. Esto equivale a una tasa de mortalidad de 12.08 por cada mil personas en ese rango de edad. Mientras que el promedio mundial es de 11, según estima el más reciente informe del Grupo interinstitucional de las Naciones Unidas para la estimación de la mortalidad infantil (IGME). ffa/ncl/mrg