El 25 de agosto de 1825, en la Sala de Representantes reunida en la Florida, Uruguay proclama su independencia del Imperio brasileño, al que el país había sido anexionado por los portugueses, convirtiéndose así en parte de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Esta independencia se dio gracias a miles de orientales en Piedra Alta de la Florida, a unos 100 kilómetros de Montevideo, que declararon la libertad basándose en tres leyes fundamentales: la ley de unión, la de pabellón y la de independencia.
Cada año, los uruguayos conmemoran estos hechos y el sacrificio que hicieron todos los combatientes por lograr la libertad y la independencia.
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