El 15 de agosto de 2008, Fernando Lugo, líder de la Alianza Patriótica para el Cambio, asumió la Presidencia de Paraguay. El obispo progresista logró una victoria incuestionable en las elecciones de abril del mismo año, terminando con más de 60 años de gobierno absoluto del partido Colorado. El mandatario paraguayo fue víctima de un golpe de Estado parlamentario en 2012, orquestado por sectores opositores. Tras su destitución, el izquierdista Lugo volvió a la política en 2013 y ocupó un escaño en el Senado por el partido Frente Guasú hasta 2018, cuando fue reelegido por un período más como senador nacional por el mismo partido. fmd/rba