El 15 de octubre de 1992, Rigoberta Menchú, líder indigenista de Guatemala, galardonada con el Premio Nobel de la Paz. El Premio Nobel de la Paz fue adjudicado a Rigoberta Menchú, de 33 años, conocida líder indígena y campesina de Guatemala.
El comité noruego encargado de atribuirlo subrayó “su trabajo a favor de la justicia social y la reconciliación entre los diferentes grupos étnicos, basada en el respeto por los derechos de los pueblos aborígenes”.
Menchú conoce de cerca la pobreza extrema, la explotación laboral y la discriminación, circunstancias que la han movido a ser una defensora empática con las necesidades de su etnia en Guatemala y el mundo.
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