En el nombre de Dios, todopoderoso. Bienvenidos a otro episodio de nuestra serie semanal titulada “Camino hacia la luz”, que es un esfuerzo para que usted y nosotros nos familiaricemos con una explicación fácil y fluida de la Escritura final de Dios a toda la humanidad, el Sagrado Corán, que fue revelado a el último y más grande de todos los mensajeros, el profeta Mohamad (saludos sean para él y todos sus descendientes). Comencemos con la aleya 15 de la sura Al-Ahqaf:
وَوَصَّيْنَا الْإِنْسَانَ بِوَالِدَيْهِ إِحْسَانًا حَمَلَتْهُ أُمُّهُ كُرْهًا وَوَضَعَتْهُ كُرْهًا وَحَمْلُهُ وَفِصَالُهُ ثَلَاثُونَ شَهْرًا حَتَّى إِذَا بَلَغَ أَشُدَّهُ وَبَلَغَ أَرْبَعِينَ سَنَةً قَالَ رَبِّ أَوْزِعْنِي أَنْ أَشْكُرَ نِعْمَتَكَ الَّتِي أَنْعَمْتَ عَلَيَّ وَعَلَى وَالِدَيَّ وَأَنْ أَعْمَلَ صَالِحًا تَرْضَاهُ وَأَصْلِحْ لِي فِي ذُرِّيَّتِي إِنِّي تُبْتُ إِلَيْكَ وَإِنِّي مِنَ الْمُسْلِمِينَ
Hemos ordenado al hombre que se porte bien con sus padres. Su madre le llevó con molestia y con molestia le di