Al cumplir un año de su mandato, Lenín Moreno presentó el balance del primer año en la Presidencia de Ecuador. El mandatario señaló que "hace un ano descubrimos que la mesa estaba vacía". "Maquillaron datos, cifras, encuestas, proyecciones, se lo llevaron todo...". El discurso fue utilizado para descalificar a su antecesor, Rafael Correa, y a su equipo, del que había formado parte como vicepresidente. En la actualidad se abre el interrogante de si existe o no un giro de su modelo de gestión hacia la derecha. Sus antiguos aliados lo rechazan e identifican con sectores conservadores por sus asociaciones con el Gobierno de Estados Unidos, con el sector privado o con el Fondo Monetario Internacional (FMI). El mismo mandatario afirmó que “los modelos socialistas estaban caducados”. Analistas aseguran que este segundo año de mandato podría estar marcado por el abandono de esta forma de gobernar. A esto hay que agregar la renovación de su Gabinete y el cambio de tres ministros de Economía