Israel parece haber reconocido, en secreto, su culpabilidad en los crímenes de guerra que ha cometido en la asediada Franja de Gaza. De hecho, incluso ha elaborado su propia lista de todos los culpables de los crímenes de lesa humanidad en su guerra de 2014 contra el enclave costero.
Tel Aviv ha compilado una lista secreta de 200 a 300 funcionarios que, en el futuro, podrían ser blanco de la Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya u otras organizaciones que buscan el arresto de criminales israelíes, como se ha hecho en el pasado con funcionarios israelíes que viajaron al extranjero.
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