Ángel es uno de los vecinos más entrañables de Casatejada. Por motivos de trabajo, nuestro trasteador ha vivido muchos años fuera de su pueblo. Ángel ha sido militar, ha trabajado en distintos museos e incluso ha sido entrenador de fútbol femenino. Pero lo cierto es que esperaba con impaciencia la jubilación, para regresar al que él considera su hogar, reencontrarse con sus viejos amigos y tener un lugar especial para guardar sus tesoros. Es tal el aprecio que Ángel tiene por sus cosas que cuando hizo su casa proyectó un garaje solo para sus trastos. Ángel siente cariño por todo lo que guarda y para él sería imposible vender lo que durante años ha ido recopilando a base de patearse mercadillos, pedir a sus amigos o buscar en escombreras, pero si de algo se siente orgulloso es de su colección de botijos, y es que este vecino de Casatejada ha llegado a reunir más de 200. El sueño de la madre de Paqui era que su hija volviera al pueblo y restaurara la casa familiar. Paqui, que hace añ