En estos tiempos difíciles aumenta el número de personas que dedican gran parte de su tiempo a ayudar a otros. Este jueves, os presentamos a una pequeña muestra de lo que hemos llamado: “Extremeños con conciencia”.
Federico y Elena son un ejemplo de solidaridad de pareja. Él enfermo del riñón necesitaba con urgencia un donante para poder hacer vida normal. Lleva casi tres años asistiendo de forma semanal al hospital para realizar su tratamiento de diálisis, y ya que su caso se estaba demorando mucho en el tiempo, su mujer decidió tomar cartas en el asunto y hacerse las pruebas de compatibilidad. Visto que todo era posible, ahora sólo esperan que dentro de unas semanas se celebre la operación.
Petri a sus 72 se levanta cada mañana desde hace ya muchos años con una sola intención... la de ayudar tantas veces como le sea posible. Soltera y sin hijos, ha tomado las riendas del comedor Social de San Agustín de Badajoz, donde lleva la contabilidad, prepara comidas, las sirve y encima busca
