La tapa debería ser nombrada Patrimonio de la Humanidad. A los Extremeños nos gusta tapear. Es como un acto social. Hay de todos los gustos y todos los tipos. Y las catedrales del tapeo y del buen comer son las tabernas, con sabor auténtico y solera. Visitaremos zonas donde la tapa renace, viajaremos a rincones escondidos de nuestra Región donde todavía es posible entrar a tabernas antiguas y tomaremos un aperitivo en barras de toda la vida. Por que las tapas, las cañas y las tabernas forman parte de nuestra vida.