La comunidad científica considera que los responsables políticos no disponen de mecanismos adecuados para estar informados sobre los riesgos que se derivan de la contaminación ambiental a escala planetaria. Por ello, un equipo de investigadores acaba de proponer la creación de un organismo internacional que ponga en la agenda este problema y que también sirva de punto de encuentro con la industria y la sociedad civil. Nos lo cuenta uno de sus impulsores, Joan Grimalt, investigador del IDAEA-CSIC.