"La situación es muy extrema. Hay gente que está realmente mal". Son declaraciones de Ernesto Méndez, responsable del sector financiero de UGT, que ha denunciado la presión que sufren los empleados del sector para cumplir con los objetivos comerciales. Una situación que está llevando a trabajadores jóvenes a acogerse a salidas voluntarias y a cambiar de actividad profesional.
Es una de las consecuencias del proceso de integración de entidades iniciado hace más de una década y que este miércoles vivirá un nuevo capítulo este miércoles con la integración de Liberbank y Unicaja. Desde 2008, el sector de la banca ha perdido uno de cada cuatro empleos en la región.