Manola ha dedicado su vida a su madre y a sus alumnos, sin embargo ahora que se ha jubilado y está sola, el fútbol llena sus días. Madridista hasta la médula ha conseguido una gran familia gracias a su tremenda vitalidad y simpatía. Su peña se ha convertido en su segundo hogar y el club merengue en el leitmotiv de la decoración de su casa. Gema ha tenido que asimilar que no puede ser mamá. Una complicación en quirófano hizo imposible su mayor deseo. Ni la fecundación in vitro pudo ayudarla, ella ahora quiere con su testimonio dar ánimos a otras mujeres que viven su misma situación. Pepa es una centenaria muy especial. Hace más de 70 años que viste de negro,recién acabada la Guerra Civil Española comenzó el luto. Ella ha seguido a rajatabla esta tradición popular ya en desuso.