En 1956 se inauguró la cementera de Los Santos de Maimona. Más de 300 familias trabajan dentro de estas instalaciones. Pero el sueño industrial del municipio terminó en 1973, cuando este espacio cerró sus puertas. Es entonces cuando el terreno, junto con los edificios, fueron cedidos al Ayuntamiento. Tras cuatro décadas en desuso, el Consistorio santeño cedió parte de los terrenos a diferentes agrupaciones. Fue a partir de ahí cuando en este espacio se empezaron a fabricar ideas naciendo LaFábrika detodalavida. Un proyecto que plantea la recuperación de un espacio industrial sin uso para la gestión social del territorio y la socio-cultural en el ámbito rural.