La sociedad en general está poco concienciada sobre la importancia que tienen los insectos para el medio ambiente. Por lo general cuando un eslabón es alterado, afecta a todo el ecoistema pero son precisamente ellos, un eslabón crucial para mantener la biodiversidad. Son la base de la vida.
Se estima que cerca del 40% de las especies de insectos se encuentran en peligro de extinción y los programas de conservación se centran principalmente en los grandes vertebrados.
La polinización o la descomposición son algunas de sus funciones y no hay que olvidar que son los frutos que comemos o la creación de la materia orgánica.