Si el tiempo acompaña y el pedrisco no causa estragos en el norte cacereño, este año la cosecha de cerezas casi doblará la de 2020 y se alcanzarán los 35 millones de kilos. De ellos, unos 7 y medio serán de Picotas del Jerte. La Denominación de Origen Protegida nos anuncia que esta variedad está a punto de llegar a los mercados, por las que se venden ahora mismo bajo ese nombre serían cerezas desrabadas.
El avance de la vacunación contra la covid está normalizando una campaña en la que la mitad de lo recogido se dedica a la exportación. Europa es el destinatario mayoritario, y entre sus países, Reino Unido es un lugar preferente en el que saben distinguir muy bien nuestra Picota, del resto de variedades. Además, la D.O. trabaja con las cooperativas para que este fruto llegue cada vez a más lugares del lejano oriente.