Esta semana “El Emigrante” vuelve a la carretera para desplazarse hasta Sedaví en Valencia. Allí vive desde hace 37 años Rosa López natural de Santa Amalia, Badajoz. Su situación económica en Extremadura era muy cómoda, su padre era peluquero y ella trabajaba en la sastrería de su hermano, pero se enamoró de un chico de su pueblo que había emigrado a Alemania. Cuando le propuso matrimonio la condición indispensable era que le acompañara al extranjero, así que Rosa abandonó su querida Extremadura. El día de la despedida recuerda sobre todo a su hermano pequeño, enfermo de diabetes, del que se encargaba muchas veces y lo dejaba solo al cuidado de sus padres. En Alemania durante cuatro años marido y mujer trabajaron en una fábrica de embutidos, pero cuando Pedro, su marido, tuvo una oferta de trabajo de una fábrica de coches valenciana no se lo pensaron dos veces, volvieron a España. Se han establecido en la Comunidad Valenciana donde han formado una familia. Después nos desplazamos a Bur