Esta semana conocemos la historia de la familia de Constancio González, compuesta por su madre, él y sus tres hermanos, apenas tenía recursos para sobrevivir. Constancio trabajaba en diversos oficios, como la agricultura o la construcción. Con 20 años de edad, decidió abandonar Garrovillas, su pueblo natal en Cáceres, y emigrar para labrarse un futuro mejor, aprovechando que su novia Laura iba a emigrar con su familia a Reus. Partieron en febrero de 1962, y Constancio recuerda que sintió una gran tristeza al despedirse de su familia. No había salido nunca de su pueblo, y no sabía lo que se iba a encontrar. Además, recuerda que el viaje fue muy largo y pesado. Constancio pronto se adaptó a Cataluña. Encontró trabajo como paleta en la construcción, oficio que mantuvo hasta su jubilación. En la actualidad, Constancio y Laura tienen dos hijas y cuatro nietas. Después viajaremos hasta Santander, donde reside María Fernanda Murillo, de profesión enfermera. Aunque había residido en difere