El cortadero normalmente se sitúa en una traviesa de la mancha a cazar, y suele ser o bien un cortafuegos o una pista amplia. El puesto se suele situar en uno de los bordes del camino y los puestos suelen estar situados en el mismo borde, idealmente a unos 150 metros o mas los unos de los otros. Estos puestos pueden ser extremadamente peligrosos si no se es prudente, por lo que son puestos tan seguros como los cazadores que los ocupan lo sean.