Nos hacemos eco de una realidad: cada vez más gente prefiere vivir en un pueblo antes que la ciudad. Contaremos la historia de dos familias que dejaron todo en la ciudad y se vinieron a vivir a Extremadura. Veremos cómo no se es de un pueblo hasta que uno no tiene su mote y en Cedillo comprobaremos cómo hasta el alcalde tiene el suyo propio. Entre los testimonios de actualidad tendremos a los que llamamos “indispensables” del pueblo: el maestro, el cura, el farmacéutico y hasta la cotilla.