La falta de condiciones en el albergue y el rechazo social acentúan la desesperación entre los migrantes. Cada vez más centroamericanos se plantean cruzar la frontera saltando el muro o por el mar, aunque deban arriesgar su vida. Los promotores de la Caravana piden “paciencia” para realizar un proceso de asilo que puede durar al menos dos meses.