La implementación del Plan Conectar Igualdad requirió el desarrollo de estructuras tecnológicas y de conectividad en las escuelas, nuevas formas de enseñanza y una inmensa estructura industrial para fabricar tres millones de computadoras con un software específico. Así, el plan constituyó una verdadera herramienta educativa, que fomenta el uso de las TIC en la educación y propone un cambio en ella que mira el presente y el futuro. Gisela Busaniche nos invita a profundizar en las prácticas y desarrollos que involucra este proyecto.