Un nuevo alumno, Ben, llega a la escuela y se hace amigo de Estefi. Charly se pone celoso y sospecha de él. Carl Witt, el padre de Ben, es acusado de haber robado unas figuritas de arte y el grupo intentará probar su inocencia. Bueno, ¡todos menos Charly, que está convencido que Carl es culpable! Ben los ayuda en la investigación, que acabará llevando a los chicos a la Galería de Arte Tartiflette. Una vez resuelto el caso, Carl decide mudarse de nuevo a otra ciudad donde no les conozcan. Estefi se pone triste ya que no podrá volver a ver a Ben.