Rabanito tiene miedo de suspender el próximo examen de matemáticas: ¡es un test oral y a él no le gusta hablar en público! Mientras tanto, empiezan a desaparecer los pepinos del huerto que tiene la abuela de Charly, Margaret. I para acabar de rematarlo, el Ayuntamiento amenaza con acabar con todos los huertos de la ciudad (¡incluyendo la Agencia y la caseta de Precioso!) para construir un aparcamiento. Rabanito descubrirá que el hombre detrás de todo es el alcalde, quien en el pasado fue el ayudante de Margaret. Rabanito encuentra entonces una solución para cambiar la decisión del Ayuntamiento.