Durante un acampada en la selva, los conejitos valientes conocen a Chika y Chuka, dos monitas hermanas de la jungla. Jugando los cuatro a la pelota, a las monitas se les olvida siempre devolvérsela a los conejos. Por esta razón Boo rompe a llorar. Para consolarla, Bop se inventa el "balón-Boo".