¿Qué tiene el Camino de Santiago para que la gente lo repita una y otra vez? ¿Cómo afecta a la economía de los pueblos aragoneses por los que pasa? ¿Quién "cuida" el camino?. ‘Unidad móvil’ recorre este viernes el tramo aragonés del Camino de Santiago y conoce las historias de los peregrinos y trabajadores.
El Camino Aragonés comienza en Somport. Desde hace 20 años, la fórmula más popular entre los peregrinos que quieren llegar hasta allí, es tomar uno de los cinco autobuses de la línea comarcal Jaca - Astún. Entre los viajeros, un pamplonés que hace un tramo del camino una vez al año. Al final del trayecto en bus les espera el albergue Aysa (donde pueden pasar la noche por 14 euros), la Virgen del Pilar de Somport y el monolito que inicia el arranque de la ruta: a partir de ahí, al peregrino le aguardan 858 km hasta Santiago.
José Antonio, prejubilado oscense, es uno de los valientes que se prepara para echarse a andar. Este será su octavo camino. Mientras repasa fotos de otra