Los glaciares alpinos, los antiguos mares y los caudalosos ríos de Austria han creado montañas, cuevas y lagos gigantes, claves para la vida silvestre actual. Las águilas, los íbices, las marmotas y los ciervos son icónicos, pero hay otras criaturas. A través del deshielo de los glaciares, a través de cascadas, arroyos y lagos, el agua encuentra su camino río abajo, creando hábitats para linces, lobos y zorros, pero también para búhos, murciélagos, ranas, libélulas y aves acuáticas. El mundialmente famoso santuario de aves de Austria, el lago Neusiedl, tiene sus secretos.