El Silencioso acude a una recepción en la embajada de Francia en compañía de Esmeralda, quien deja a todos boquiabiertos con su nueva apariencia. Lorenza habla mal de Esmeralda con la mujer del embajador, lo que provoca las amenazas del Silencioso. Fela se escapa del basurero porque cree que va a salvar a su hija.