Aunque Asli no es capaz de derribar el muro que les separa, Burak tiene claro que su futuro no está junto a Çagla por más que sus familias insistan en consolidar su relación. El día que han pasado juntos les ha servido a ambos para darse cuenta lo mucho que se gustan y lo bien que están juntos. Por su parte, Basak se anota un tato muy especial al descubrirle, de forma anónima a su hija, que su padre y Elçin mantienen una relación a sus espaldas.