El nadador paralímpico Toni Ponce confiesa a Teledeporte que lo peor que lleva del confinamiento es "no poder hacer mi rutina, entrenar ni prepararme para campeonatos porque no sabemos qué va a pasar". Añade que en cuanto pueda, lo primero que hará es "ir a ver a mi familia, mi hermana, mis abuelos, mis tíos... lo que también quiero es ir a entrenar, ver a mi entrenador y mis compañeros; volver a la rutina". Ponce está aprovechando, en cambio para "aprender idiomas, sobre todo el inglés que lo necesitamos mucho cuando viajamos". Aunque ha descubierto una pasión: "A mí mujer y a mí nos ha sorprendido hacer puzzles" y muestra "el primero que hicimos, de 4.000 piezas".