En la prueba inicial, los jueces sorprenden a los aspirantes con unos platos que les resultan especialmente familiares, como preámbulo a la visita sorpresa de sus seres queridos. Cada aspirante debe reinterpretar un plato emblemático de su familia. En exteriores, el escenario esta vez es "Les Cols", el restaurante que Fina Puigdevall lidera en Olot (Girona). Aquí, los aspirantes se enfrentan de nuevo a un menú 2 estrellas Michelín. Un total de 32 paladares expertos someten a juicio su trabajo. Fina y su hija, Martina Puigvert, son las encargadas de aconsejar a los aspirantes. Por último, un sofisticado postre es la prueba de fuego a la que se enfrentan los aspirantes en esta eliminación. El repostero Jordi Bordás, ganador de la copa del mundo, acompaña a los jueces a lo largo de esta prueba para supervisar las creaciones.