El CETA, el acuerdo de libre comercio entre los 28 y Canadá, tiene ya el visto bueno del Parlamento Europeo. En medio de las protestas de los contrarios al tratado, que han llevado su rechazo hasta las mismas puertas de la Eurocámara en Estrasburgo, el pacto ha salido adelante y puede entrar ya en vigor de forma provisional. Completa y definitivamente no lo hará hasta que no lo ratifiquen todos los parlamentos nacionales.