La entrada de aire frío, de componente norte, producirá el inicio de una bajada brusca de temperaturas de hasta diez grados por el noroeste, que las situará en valores por debajo de los habituales para esta época del año. El descenso de temperaturas afectará a las mínimas y a las máximas, e irá acompañado de viento puntualmente fuerte, lo que aumentará la sensación térmica de frío, especialmente en zonas altas. Esta entrada de aire frío provocará el descenso de hasta diez grados de temperatura en el norte, pero no afectará al área mediterránea, donde, por el contrario, podrán subir aún más los termómetros. Las temperaturas máximas estarán comprendidas entre los 10/15 grados del interior del área Cantábrica y Pirineos y los 30/35 grados del valle del Guadalquivir. Especialmente significativa la bajada de las mínimas, que alcanzarán valores por debajo de los 10 grados en el interior del cuadrante noroeste peninsular y amplias zonas del sistema Ibérico y Pirineos, donde se podrán producir
