El primer fin de semana de septiembre se prevé típicamente veraniego marcado por temperaturas altas en los valles de Extremadura, sur de Castilla y León y en el Valle del Ebro, y en ascenso en la cornisa cantábrica, que sumada a la escasa humedad, mantiene el riesgo "muy alto" de incendios en todo el país. Un anticiclón concentrado sobre las Azores traerá un tiempo estable en la Península Ibérica y Baleares con temperaturas "más altas de lo habitual para esta época del año", ha explicado a Ef El aumento de temperaturas y la escasa humedad mantendrán la alerta de incendios por toda la geografía española, con "riesgo extremo" en el norte peninsular y "muy alto" en el resto de la península, incluidas Baleares y Canarias. Las temperaturas máximas aumentarán entre 2 y 3 grados en los valles de Extremadura, el sur de Castilla y León, en el Valle del Ebro y en el área de Levante y en el resto del territorio el incremento "apenas será de un grado", aunque a partir del lunes descenderán ligeram