El último fin de semana del verano trae un adelanto del otoño, con lluvias y una bajada notable de las temperaturas. Las primeras semanas del otoño serán más cálidas de lo habitual y normales en cuanto a precipitaciones. El último fin de semana del verano tendrá un tiempo más propio del otoño, ya que se esperan precipitaciones, chubascos y tormentas, sobre todo en el extremo norte y en el este y un descenso térmico notable, de seis a nueve grados centígrados, con nevadas por encima de 1.800 metros de altura en los Pirineos, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Según ha informado el portavoz de la AEMET Rubén del Campo a Europa Press, el fin de semana del 15 al 17 de septiembre se esperan precipitaciones en el Cantábrico, que serán persistentes en el litoral oriental y también habrá chubascos y tormentas localmente fuertes el viernes y el sábado en el tercio este peninsular y en Baleares. También afectarán con menor intensidad al área pirenaica, donde serán en