Héctor  debe detener a Pascual pero retrasa el momento todo lo que puede, su corazón y su deber están enfrentados. Ana se queda a dormir en casa de los García. Los tres jóvenes, solos en casa,  beben, bailan y se divierten, hasta que la fiesta se acaba porque Ana rompe a llorar y Héctor llega para detener a Pascual. Marcelino y Pelayo buscan ayuda en Sole porque ellos no logran levantar el ánimo a Manolita. Sole tampoco lo consigue y cree que, esta vez, Manolita ha tocado fondo. Bruno quiere que su hijo le explique por qué ha mentido recibir acerca de la visita al médico, pero Juan  pide que no le abrume. No quiere ir al médico porque se encuentra perfectamente y si va quizás le encuentren algo que ahora no tiene. Elena confirma que Ramón tiene la tensión alta  y que sufre arritmias. Tras un mareo y ante la insistencia de Elena para que se quede en su casa y descanse, Ramón acepta. Elena lo encuentra desmayado en el suelo.