Don Matías se presenta en casa de Carlota y le regala unos libros. Angustias descubre a Carlota las encubiertas intenciones de don Matías y ésta reacciona mal, y en un arrebato vende los libros. Elisa, preocupada por su apariencia, sisa dinero para comprarse maquillaje. Finalmente termina confesando su falta a Paloma, quien le aconseja ser más natural. Tras recibir un ostentoso regalo de Ildefonso, Paloma deja las cosas claras con él, pero acaba accediendo a acompañarle a una cena de gala. Mario, negándose a rendirse ante la presión policial, se traslada a vivir de manera permanente con Consuelo, reafirmando su compromiso hacia ella. Marcos se muda a una buhardilla del barrio y Sole, que sigue dando muestras inequívocas de su interés por él, se ocupa de arreglársela.