Fabián se pregunta, escamado, qué pretende y trama Rafael, que se muestra encantador con todo el mundo. No llega la partida de defunción del marido de Pura, neceario para que Isidro y ella se puedan casar. Manolita lleva el bar de Marcelino como un cuartel. Y a éste y a su padre les impone el nuevo roden. La tensión sigue en casa de los Ayala. Forzada por Mario, Eulalia hace una visita a los Robles para interesarse por Rodrigo. Éste, desorientado por las drogas, la confunde con Andrea. Eulalia se entera así de que Andrea se casó con Mario para salvar la vida de Antonio.