Mario ofrece a Andrea una posibilidad de ver a Antonio. A través del capellán de la prisión, ha logrado organizar una peculiar cita, para que Antonio, desde el patio, pueda saludar a Andrea, que lo verá desde un edificio cercano. El encuentro provoca gran ansiedad en ambos, y determina a Andrea a apostar por la ceremonia religiosa: cualquier cosa por estar de nuevo con su amor.Fabián, por su parte, usa sus influencias políticas para librar a Paloma del acoso de Rafael. Éste intercepta una posible amonestación y actúa con más cautela con Paloma¿ Tampoco a Fabián le sale el plan tan bien como quisiera: sus reiteradas ausencias siembran en su matrimonio la semilla de los celos. Para colmo, Rafael se arriesga a espiar en el interior de la tienda, en el preciso momento en que Fabián y Paloma consuman su amor. Rafael descubre la relación entre ambos, y confirma que es su antiguo jefe y eterno enemigo quien protege a Paloma¿