Teresa y Fernando preparan el ágape en la chocolatería. Cayetana está feliz, hace un brindis y recuerda a Fabiana, quien alarga su estancia en el hospital. Felipe se queja de que Celia no dé la cara. Además, no quiere abandonar su casa y Consuelo le declara la guerra. Felipe consigue el indulto de Pablo. Teresa pide perdón a Mauro. Él le advierte que algún día morirá a manos de Cayetana. Arturo y Liberto llegan al duelo. Rosina se viene abajo. Elvira, por su parte, va corriendo para evitar el duelo, pero su padre finalmente dispara. Cayetana le pide a Úrsula una prueba de lealtad: matar a la Madre Ascensión. Ella no tiene más remedio que aceptar...