Las Madres de Plaza de Mayo llevan 40 años siendo un símbolo de resistencia cívica frente a los abusos del poder, y aunque el contexto político que determinó su nacimiento ha quedado atrás, las mujeres del pañuelo blanco siguen hallando a día de hoy motivos para prolongar su lucha. Entre el cariño y el apoyo del pueblo, del que siempre han estado tan cercanas, las Madres siguen manifestándose y multiplicando sus apariciones en defensa de la justicia y la memoria.