Es una urbe que puede enorgullecerse de muchas cosas, pero no de liderar el número de muertes violentas en un país que no se caracteriza justamente por lo escaso de los tiroteos. 762 personas fallecidas por heridas de bala en 2016. ¿Qué se hace para detener la violencia? En grandes ciudades, grandes problemas; pero Chicago destaca por lo excesivo y sangriento del suyo. ¿Quién se ocupa de ella y cómo? Y tal vez la pregunta más incómoda de todas: ¿por qué tanta sangre derramada?
