El mal humor de Eugenia desaparecerá cuando se enamore de un joven cubano. Además, Chema se opondrá a la creación de un centro comercial en el barrio.Eugenia está pasando por un periodo en el que su mal humor resulta insufrible para los demás miembros de la familia. Cuando Luisma y Aída aún se están preguntando cómo resolver la situación, la solución se presenta sola: Eugenia conoce en el bar a Oswaldo, un cubano que parece interesado en ella.