Según el exjefe de los paramilitares, Salvatore Mancuso, los organismos del Estado les ordenaron aniquilar a la UP, un partido político de izquierda que nació en 1985 durante los diálogos de paz entre las antiguas FARC y el gobierno de Belisario Betancur. Hasta 6000 de sus miembros fueron asesinados. Así lo relatan los sobrevivientes.